En la
época prehispánica fue ésta una zona habitada por Otomíes quienes dieron nombre
a la región como Denxi, Madenxi o Mandenxi; que significa cebollitas,
haciéndola capital de los pueblos otomíes.
Posteriormente,
fue conquistado por los Mexicas o aztecas bajo el gobierno de Axayácatl.
Durante
el virreinato de Don Luis de Velazco, el segundo de este nombre, de 1590 a
1595, se fundan “Las Canalejas” como un mercedado constituido por sitio de
ganado menor donado por merced del citado Virrey a Don Pedro Fernández, indio
nativo de Jilotepec.
Posteriormente,
por sucesión, el rancho de Las Canalejas pasa a Don Mateo de Velazco (o Velázquez)
y Ávalos, que fue marido de Doña María de Aguilar.
Al
morir Don Mateo de Velasco y Ávalos, heredó Las Canalejas a Doña María de
Aguilar, su esposa, quien a su vez dispuso por testamento del 15 de diciembre
(?) de 1689 que a su muerte se dividiera en cuatro cuartos cada uno dado en
herencia como sigue: un cuarto a Juan Méndez de Luna, otro a Jerónimo Méndez de
Luna, el tercero a Melchora de Escobar y el cuarto a Matías Méndez, a Josefa de
Escobar y a Diego de Escobar.
Es
hasta 1945, por el Decreto núm. 54 de fecha 2 de enero, que Canalejas es
elevado a la categoría de pueblo.
Por
iniciativa del Profr. Jesús Mendoza Noguez, el cabildo del Ayuntamiento de
Jilotepec eleva a Canalejas a la categoría de Villa, el 4 de noviembre del 2002
a partir del 6 de febrero del 2003.
Para mayor información, consulta el libro
“Las Canalejas. Un enfoque histórico y antropológico”. De Efraín Noguez Noguez.
De venta en la papelería Mar-San, en Villa de Canalejas, Jilotepec, México.